para recordar
Shamsky entra como sustituto y da 3 H4
El viernes 12 de agosto de 1966 en el Crosley Field, hogar de los Rojos de Cincinnati, un total de 25,477 fanáticos fueron testigos de observar a Art Shamsky disparar tres jonrones cómo bateador reemplazo en un mismo desafío.
La historia de esta hazaña inició cuando en la parte alta del octavo episodio Cincinnati realizó un doble reemplazo. Shamsky, quien no comenzó el partido entró a defender en esa entrada el jardín izquierdo en sustitución del lanzador Joe Nuxhall, quien había sido parte del doble reemplazo.
En ese acto Cincinnati figuraba debajo en el marcador 7 – 6, la misma fue iniciada por Leonardo Cardenas, de Cuba, con sencillo, luego un sacrificio colocó la carrera del empate en la intermedia, Shamsky descargó en su primer turno que agotaba un jonrón de dos vueltas frente a Al McBean, de los Piratas para colocar el juego 8 – 7 a favor de los Rojos.
En el acto 10 Shamsky volvió a despachar jonrón para empatar el juego a 9 carreras, este batazo fue contra Roy Face, relevista. Luego en la entrada 11, Shamsky frente al zurdo Billy O´Dell produjo el tercer bambinazo, él cual fue con uno a bordo para empatar de nuevo el desafío a 11 vueltas por parte.
El partido se extendió hasta la entrada 13 donde en la parte de arriba de ese episodio los Bucaneros fabricaron tres carreras, el cual inició Mateo Rojas Alou con sencillo, quien luego corriendo en la intermedia fue remolcado por imparable de su compatriota Manuel Mota para los Piratas tomar la delantera del desafió, luego anotaron dos vueltas más para finalmente ganar 14 – 11 en 13 episodios.
Protesta racial
El jueves 8 de mayo de 1947 en el Ebbets Field, de Brooklyn, luego de que se existiera el rumor que varios jugadores de los Cardenales iniciarían una huelga como señal de protesta por no jugar con Jackie Robinson, el presidente de la Liga Nacional, Ford Frick, y el dueño del equipo Sam Breadon, anunciaron que cualquier pelotero directamente involucrado en cualquier acto de prejuicio racial o desobediencia será suspendido de manera indefinida.
El manager de los Cardenales, Eddie Dyer, negó rotundamente las acusaciones y sus “Pajaros Rojos” jugaron muy tranquilos y ganaron el encuentro a los Dodgers 5– 1.