a tiro de hit
Con Dave Roberts como dirigente, los Dodgers están en buenas manos
La serie celebrada en Japón entre Cachorros de Chicago y Dodgers de Los Angeles resultó un rotundo éxito. No se esperaba menos, considerando la popularidad del béisbol y de los Dodgers en la nación asiática, sumada a la presencia de Shohei Ohtani, principal figura global del deporte, y otros cuatro jugadores nativos.
Otra figura buscada fue Dave Roberts, el popular dirigente de los Dodgers, quien nació en Okinawa, fruto de la unión de Waymon Roberts, “Marine” nacido en Estados Unidos apostado en Japón y Eiko, una señora japonesa.
Luego de una niñez caracterizada por frecuentes mudanzas provocadas por la carrera de su padre, Roberts fijó residencia junto a su familia en San Diego y comenzó a desarrollarse como prospecto en sus años en la escuela secundaria.
Gracias a su velocidad y condiciones atléticas, fue reclutado por los Tigres de Detroit en el sorteo de novatos de 1994, y eventualmente pudo labrar una carrera de 10 temporadas en Grandes Ligas con cinco equipos, entre ellos los Dodgers.
Su momento icónico llegó con el uniforme de los Medias Rojas de Boston en 2004, cuando entró a correr de emergente en el noveno episodio del cuarto encuentro de la Serie de Campeonato, se robó la intermedia y anotó la carrera que empató ese partido. Allí inició el famoso “comeback” de los Medias Rojas, que rebotaron de un déficit 0-3 para derrotar a los Yankees en la disputada serie y eventualmente coronarse campeones.
Roberts se mantuvo activo hasta 2008, bateando .266 con 243 bases robadas en su estadía en MLB.
Luego de cuatro temporadas como coach de los Padres de San Diego, Roberts honró las predicciones de que sería líder de un equipo de Grandes Ligas, cuando fue nombrado para dirigir a los Dodgers el 23 de noviembre de 2015.
Pese a varios fracasos en post-temporada, el éxito del dirigente asiático-americano es incuestionable. Así lo avala su porcentaje de ganados y perdidos de .627 y ocho títulos divisionales en nueve estaciones.
Es cierto que ha contado con equipos pletóricos de talento en ese lapso, pero es válido destacar las virtudes del capataz de 52 años, cuyo liderazgo, habilidad para manejar los egos de superestrellas y excelente manejo con la prensa le han permitido sobresalir como uno de los mejores en la industria.
Con su aura de “manager” campeón, le tocó negociar un nuevo contrato, siendo premiado por la gerencia de los Dodgers con el salario más alto para un “manager” de MLB. Entendemos que esa distinción fue ganada en base a sobresalientes resultados a lo largo de un decenio.