Muerte de la surcoreana Kim Sae-ron saca a flote lo cruel de las redes sociales contra celebridades

La muerte de la actriz sudcoreana Kim Sae-ron esta semana ha provocado una oleada de dolor y peticiones para cambios a la forma en como se trata a las celebridades del país en la esfera pública y en las redes sociales que, según los críticos, puede fomentar una cultura de acoso.

La joven de 24 años, que comenzó su carrera como actriz infantil y ganó reconocimiento por sus papeles en varias películas nacionales, incluyendo el thriller de 2010 “Ajeossi” (“El hombre de ninguna parte”), fue encontrada muerta por un amigo en su casa en Seúl el domingo. Se asumió que su muerte fue un suicidio. 

La Agencia Nacional de Policía declaró que no sospecha de algún acto criminal y que Kim no dejó ninguna nota.

Algna vez fue de las estrellas más grandes en la vibrante escena cinematográfica y televisiva de Corea del Sur, pero Kim luchó por encontrar trabajo después de un incidente de tránsito bajo los efectos del alcohol en 2022, por el cual fue multada en tribunales.

Las publicaciones en línea en Corea del Sur son notoriamente duras con las celebridades que cometen errores, especialmente las mujeres, y Kim enfrentó una cobertura negativa constante por parte de organizaciones noticiosas que capitalizaban el sentimiento público.

Los periódicos y sitios web la criticaban cada vez que se le veía de fiesta con amigos, o cuando se quejaba de su falta de trabajo y de los comentarios desagradables en las redes sociales. 

Incluso fue criticada por sonreír mientras filmaba una película independiente el año pasado.

El periódico Hankook Ilbo afirmó que los medios de comunicación del país son parte del problema, lamentando que algunos continuaran explotando a Kim para obtener clics incluso después de su muerte, utilizando titulares provocativos que destacaban sus luchas pasadas.

La organización de vigilancia Coalición de Ciudadanos por los Medios Democráticos criticó el martes a las organizaciones de noticias por culpar a las redes sociales sin considerar su propia “cobertura sensacionalista y provocativa”.

Nacida en el 2000, Kim comenzó su carrera actoral a los nueve años, con la película de 2009 “Yeo-haeng-ja” (“Una vida nueva”), en la que retrataba las luchas de una niña para adaptarse a una nueva vida después de ser dejada en un orfanato por su padre. Alcanzó la fama con “Ajeossi”, que fue uno de los mayores éxitos en la escena cinematográfica surcoreana ese año y le valió un premio nacional de actuación.

Sumó otros créditos en películas y televisión antes de su incidente de tránsito bajo los efectos del alcohol de 2022.

Gold Medalist, la antigua agencia de gestión de Kim, no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Tras la muerte de Kim, varios de los principales periódicos del país publicaron el martes editoriales y artículos de opinión condenando los comentarios tóxicos en línea sobre la actriz. 

Algunos recordaron las muertes por suicidio en 2019 de las cantantes de K-Pop Seol-li y Goo Hara, así como la muerte en 2023 del actor de “Parasite” (“Parásitos”), Lee Sun-kyun, al tiempo que pedían un cambio en la cultura “dura y de cero tolerancia” hacia las celebridades.