BUENOS AIRES, Argentina
Departamento de Estado prohíbe ingreso a expresidenta argentina a EEUU por corrupción
Fernández y Julio De Vido, quien fue su ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios durante sus dos gobiernos “abusaron de sus cargos al orquestar y beneficiarse financieramente de múltiples esquemas de soborno relacionados con contratos de obras públicas, lo que resultó en millones de dólares robados al gobierno argentino”, sostuvo el secretario de Estado, Marco Rubio.

La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner observa durante su presentación como presidenta del Partido Justicialista en su sede en Buenos Aires, Argentina, el 11 de diciembre de 2024. (Foto AP/Gustavo Garello, Archivo)
El Departamento de Estado prohibió a la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), a sus dos hijos y a un exfuncionario entrar a los Estados Unidos por estar involucrados en “importantes” casos de corrupción.
Fernández y Julio De Vido, quien fue su ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios durante sus dos gobiernos “abusaron de sus cargos al orquestar y beneficiarse financieramente de múltiples esquemas de soborno relacionados con contratos de obras públicas, lo que resultó en millones de dólares robados al gobierno argentino”, sostuvo el secretario de Estado, Marco Rubio, en un comunicado difundido el viernes.
La resolución también alcanza a Máximo y Florencia Kirchner, hijos de la exmandataria de centro-izquierda.
Rubio recordó que “múltiples tribunales han condenado a CFK y De Vido por corrupción, lo que ha socavado la confianza del pueblo argentino y de los inversores en el futuro de Argentina”.
Fernández de Kirchner fue condenada en 2022 a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por el delito de “administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública”.
El tribunal consideró que la expresidenta cometió un fraude millonario al Estado mediante la asignación irregular de obras públicas en la provincia sureña de Santa Cruz a un empresario allegado durante sus dos mandatos.
Este fallo fue confirmado la Cámara Federal de Casación Penal, máximo tribunal penal del país, y está pendiente un pronunciamiento definitivo de la Corte Suprema. Fernández de Kirchner, de 72 años, se encuentra en libertad y actualmente preside el partido Justicialista (peronismo).
La dirigente niega la acusación y consideró por su lado que fue víctima de una persecución judicial orquestada por opositores para sacarla del escenario político.
De Vido, por su parte, fue condenado a cinco años de prisión por administración fraudulenta e inhabilitado para ejercer cargos públicos de por vida en la causa por el accidente ferroviario en 2012, en el que murieron 52 personas.
Máximo y Florencia Kirchner no están condenados.
“Estados Unidos continuará promoviendo la rendición de cuentas de quienes abusan del poder público en beneficio propio. Estas designaciones reafirman nuestro compromiso de luchar contra la corrupción mundial, incluso en los más altos niveles de gobierno”, concluyó el secretario Rubio.
Fernández de Kirchner no se pronunció sobre la resolución del gobierno de Donald Trump, mientras que el presidente ultraderechista Javier Milei celebró la medida y compartió en X el comunicado del Departamento de Estado.