Un negocio de siempre

Hay quejas, denuncias o ALERTAS que van y vienen. Sólo hay que cambiarle el nombre del denunciante y de los actores principales. Cada vez que cambia un gobierno o simplemente se llega un nuevo ministro de Relaciones Exteriores, escuchamos el mismo ritmo con diferentes tonos.

Ahora le toco a Enrique García, recién designado director general de Migración. Afirma el funcionario que los cónsules dominicanos en Haití, “tienen como un negocio la expedición de visas”. Desde que tengo uso de razón, he escuchado esa denuncia en voz de diferentes protagonistas. Lo lamentable es que ningún gobierno, ningún canciller, ningún partido ha dado el paso requerido para enfrentar y corregir ese irregular negocio, que raya en corrupción.

Ha habido acciones en las que, por algún momento, hemos pensado que se tomaría el toro por los cuernos y se le pondría fin a ese negocio corrupto. Eso se ha quedado en la separación “momentánea” de uno que otro cónsul, el cual meses después, aparece designado en otra posición o aspirando a una posición electiva. Ser designado cónsul en Haití se ha convertido en “el mejor negocio” de algún político. En la nueva campanada, de una noticia VIEJA, Enrique García asegura que, de cada 100 visas que se emiten para entrar al país, 90 se facilitan a ciudadanos haitianos. Dice que los cónsules en el vecino país tienen esto como un BUEN NEGOCIO. Ha sido así por muchos años. El nuevo director de migración, promete hacer frente a esa práctica corrupta y anti nacionalista. Muchos otros han hecho la misma promesa. Confiemos que ahora, con el CAMBIO, ese negocio sea enfrentado con la seriedad y la dureza requerida. Que los recursos dejados por la venta de visas engrosen a las arcas del Estado y no a los bolsillos de particulares,