El sur: una región hecha con las manos de Dios

Se dice que República Dominicana lo tiene todo, y no hay una frase que esté más en lo cierto. Cuando se trata de recursos naturales para el deleite y disfrute tanto de locales como de turistas, no es la excepción; hay de todo para todos.

“El sur fue hecho con las manos de Dios”, se escucha comúnmente decir a quienes visitan las maravillas naturales que se encuentran en la región.

De acuerdo a Randy Ramírez, co-creador de ‘Por Ahí RD’, una característica de la región sur es que en cada provincia hay ríos, balnearios, playas (en algunas) y rutas de senderismo, que brindan a los visitantes una experiencia única y enriquecedora, no solo física, sino también emocionalmente.

En San Cristóbal existen todas las opciones. Una de las más concurridas es ‘Muchas Aguas’, un balneario que invita a desconectar del día a día y a disfrutar de la belleza y el sonido de la naturaleza. Está ubicado específicamente en Cambita Garabitos.

Para acceder a este lugar, de acuerdo a Ramírez, se debe llegar a la presa Jigüey, preferiblemente en un vehículo 4x4, debido a que el camino hasta el último charco es de difícil acceso. La ruta también se puede hacer caminando.

De igual forma Baní cuenta con atractivos ecológicos y turísticos, tal como el balneario ‘Las Yayitas’, un lugar que se encuentra en la comunidad homónima. “Allí los locales ayudan a las visitas con el parqueo. Además del cariño y buen servicio de la gente, en el pueblito también puedes conseguir comida criolla y bebidas”, explica Ramírez.

“Si nos vamos a Azua nos encontramos con una maravilla bien reservada: Playa Caobita. Un litoral que destaca por su agua cristalina y su arena clara. Cuenta con casetas en la cual puedes conseguir comida y refrigerios”, describe el joven aventurero, agregando, “¡Eso sí, prepárate para el sol, porque es fuerte!”.

Como si fuera poco, entrado ya en el sur profundo, encontramos “La Perla del Sur”, Barahona, una provincia que se caracteriza por sus playas cristalinas, y un paisaje que se muestra como espectáculo natural desde las carreteras.

Esta localidad cuenta, entre muchos otros atractivos, con la playa San Rafael, un lugar donde el agua salada se conjuga con la dulce, brindando una experiencia inigualable a quienes se sumergen en ellas.

Es uno de los lugares más visitados de la región, sin embargo, alerta Randy Ramírez, es importante tomar en cuenta que, debido al oleaje fuerte, puede ser un poco peligrosa, por lo que se recomienda precaución.

En ese mismo trayecto está la provincia de Pedernales, donde existe una gran variedad de opciones cuando de disfrutar la divinidad de la naturaleza se trata, que van desde balnearios, vegetación, hasta Bahía de las Águilas, catalogada como la playa más cristalina del mundo, y otros hermosos litorales.

En esa misma localidad, en el municipio Oviedo, está Arroyo Salado, una laguna poco conocida, que tiene como características la hermosa vegetación que le rodea y sus aguas cristalinas, que la convierten en una piscina natural de abundante humedad.

Para quienes aman el senderismo, la naturaleza se encargó de dejarles un regalo especial escondido en la provincia San Juan; la ruta del Cañón de Río Blanco, que inicia en la presa de Palomino, donde confluyen los ríos Blanco y Yaque del Sur. Luego del primer desafío, se encuentra una de las vistas más hermosas de toda la República Dominicana, hacia la Cordillera Central. Esta ruta ofrece la oportunidad de vivir una experiencia envuelta entre paisajes de ensueños, montañas, ríos, pinos y mucha vegetación.