Desde la última butaca
Pedro Páramo
Rodrigo Prieto (Ciudad de México, 1965) huele a maestría. Cámara en mano, todo director aduce seguridad cuando lo integra a su staff. Ha trabajado con Martin Scorsece, Ang Lee, Ben Affleck, Pedro Almodóvar, Tommy Lee Jones, Alejandro González Iñárritu, Spike Lee y Oliver Stone, entre otros.
Gracias a su nivel y a su cámara brillante, ha merecido importantes lauros internacionales. La crítica lo considera como un pulcro técnico, autor de algunas de las mejores y más arriesgadas tomas en la historia del cine de los últimos cuarenta años.
Con el filme recién estrenado en Netflix, Pedro Páramo, se estrena al frente de un filme, nada menos que a partir de la novela clásica de su compatriota Juan Rulfo, precursora del llamado Realismo Mágico.
Prieto se adentra en las distintas escenas fantasmales de esta novela como quien penetra en la casa de los trucos, con voces que murmuran secretos pueblerinos y visiones sobrenaturales. Es una epopeya onírica donde se arma la historia de un hombre poderoso, dueño y señor de un pueblo y sus gentes, pero víctima del amor frustrado que lo lleva al olvido y a la muerte.
Tal vez sea la cinta donde la cámara de Prieto arriesga menos y a veces acude a repetir retratos de filmes anteriores. Sin embargo, se concentra más en una historia donde los sueños se dan la mano con la irrealidad, y cuyas escenas van y vienen de un pasado reciente a un futuro laberíntico donde un hijo busca a su padre, sin saber que en el mundo que lo rodea, todo se ha perdido. Un pueblo fantasma, personajes que aparecen y desaparecen y visiones de terror conforman el guion de Mario Gil que pudo encontrar en Rodrigo Prieto a un cineasta capaz de montar esas subtramas que rodean al protagonista hasta hacerlo rodar.
El guion respeta la novela de Rulfo, sobre todo en sus inicios, donde lo visual sustituye con elegancia a la ficción literaria sin necesidad de adaptaciones poco convincentes. Una música perfecta de Gustavo Santoalalla apenas se persive por su identificacion con los planos que caen, unos sobre otros, como merecidas secuencias de una obra que cada cual interpretará y criticará a su manera.
Celebro el Pedro Páramo de Gustavo Prieto. Es el suyo. Cada quien podrá señalarle defectos, pero me quedó con este intento de cine basado en el realismo mágico. La cinta, al menos, es mucho más creativa que la realizada en 1967 por Carlos Velo, aunque otros prefieran aquella. No solo en el mundo brillan los colores. Este es cine de autor. Del bueno
Ficha técnica
País: México. Año 2024. Duración: 123 minutos. Director: Rodrigo Prieto. Guion: Mario Mateo Gil sobre la novela de Juan Rulfo. Reparto: Manuel García Rulfo, Tenoch Huerta, Ilse Salas, Mayra Batalla, Dolores Heredia, Noé Hernández y Roberto Sosa. Música: Gustavo Santoalalla. Sinopsis: Un hombre busca a su padre en un pueblo fantasma, condenado por la violencia y la furia de un amor frustrado.